jueves, 18 de enero de 2007

UNA PLAGA QUE TENEMOS CERCA.

Os pasamos un artículo que ha recogido vuestra compañera Marta Salvador de una plaga que está invadiendo nuestra zona. Las especies alóctonas que se introducen en nuestros ecosistemas nos pueden causar luego graves problemas.

SOS: EL MEJILLÓN CEBRA SE ABRE CAMINO
Los regantes de la Plana pedirán ayuda a la Universidad para frenar la plaga, que ya invade una parte del embalse del Stijar. También estudian la posibilidad de bajar el pH del agua hasta cinco para matar las larvas.

Artículo de INMA CASTELL en MEDITERRÁNEO.
SOS: el mejillón cebra nos invade. La alarma se ha disparado en las últimas semanas entre los regantes de La Plana. Y es que este molusco ha pasado de ser una diminuta una larva en el azud de Santa Quiteria a contarse por millones en el embalse de Sitjar, tal y como pudo comprobar ayer Mediterráneo. Los agricultores ya han empezado a trabajar para contraatacar una agresión que en la cuenca del Ebro costará 4,5 millones de euros anuales.
Ayer mismo, la Junta de Aguas de La Plana mostró su interés por “ponernos en contacto con técnicos de la Universidad para buscar soluciones”, explicó el presidente de la organización, Manuel Claramonte. Además, los regantes de este área se reunieron con una bióloga de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) quien les explicó que “la zona más afectada es la cota 100 en Betxi y no podemos bajar la guardia”, detalló Claramonte, quien se mostró pesimista ante una situación “que parece que no podemos controlar de ninguna forma”.
Sólo hace falta acercarse al embalse de Sitjar, cerca de Ribesalbes, para comprobar que el mejillón cebra se expande de forma alarmante. Las piedras y las paredes del pantano están invadidas por unos pequeños moluscos de cáscara rallada que se pegan con fuerza a cualquier espacio. Incluso las botellas y latas que los desaprensivos han dejado tras una visita a la zona han tardado poco en convertirse en un foco de expansión de la plaga. Por este motivo, como explicaron a éste rotativo fuentes del Seprona, día a día, una patrulla de este cuerpo pasa por la zona para evaluar su expansión.
Al respecto, el presidente de la Federación de Comunidades de Regantes de la Comunitat Valenciana. José Pascual, explicó que, una vez haya un diagnóstico de la situación de la plaga, “estudiamos probar métodos como reducir el pH del agua hasta cinco con ácido sulfúrico o potásico y ver si las larvas no viven”. Además, quieren conocer si el molusco que se encuentra en Castellón tiene exactamente las mismas características que el del mar Caspio y el mar Negro, de donde es originario, o ha vivido un proceso de adaptación.
Mientras se llevan a cabo todos estos trabajos, desde la Confederación del Júcar también realizan un seguimiento constante a través de la instalación de estaciones para el control biológico de esta especie tanto en Sitjar como en Arenós. La principal preocupación reside en el amplio poder reproductivo de la especie. Cada mejillón cría un millón de huevos. Hagan sus cuentas.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

pobres mejillones...en mis tiempos los mejillones eran decentes... etas generaciones acabaran con el mundo... jajajaja no va que esto es muy serio...que solución es la más viable queridos maestros??jajaja XD

pablo dijo...

sisisisisisisisisis...
pobrecitos mejillones, nosotros que en taller de bilogia solo los descuartizavamos vivos...me sabe mas mal... estoy de acuerdo con mon, que posible solución hay para resolver esto?
PD:Pilar tenemos que hablar sobre el comportamiento de Ainoa en tu clase que me han dicho que se ha hecho un poco bandolera

Ignasi i Pilar dijo...

Cuando metemos la "pata" el problema luego tiene muy difícil solución.
PD. No creas Pablo, creo que no me hace nadie ¡¡¡ni caso!!!.